top of page

#MisiónSonrisasMX2015, ¡Misión cumplida!

  • Abner Vélez Ortiz
  • Jan 12, 2015
  • 4 min read

Una vez más lo hemos logrado. ¡Sí, lo logramos! Estoy muy agradecido porque cada año, desde hace cuatro, hemos creído que podemos ser capaces de hacer algo, de marcar la diferencia, de salir de la comodidad de nuestros hogares y actividades y, aunque sea por un par de horas, invertir en algo y alguien que no es uno mismo.

Misión Sonrisas es algo que nace del corazón; nace del mirar más allá de lo que a simple vista se ve. Es adentrarse de tal forma que uno despierta en sí el don de tener misericordia (que no es sinónimo de lástima), el don de ser empático (que no es igual que “tener pena”) y el don de DAR. Misión Sonrisas nace del corazón para despertar a una generación de gente ayudando gente.


Desde que comenzamos a planear la Misión Sonrisas de este año recordaba a ese par de niñas que fueron las primeras que vivieron lo que hoy nos hace ser. No puedo dejar de pensar en ese par que en vez de estar en casa atareadas por llegar a la escuela ya estaban antes de las 8am en el metro acompañadas de sus padres (o eso creo que eran) pidiendo dinero, sucias por dormir en el suelo, descalzas, hambrientas, enfermas… ¡no sé! No podía creer que eso estuviera sucediendo tan cerca de mi y yo no pudiera hacer algo real, tangible.


Algunas de las niñas alcanzadas en 2015

Así que así nació Misión, de un par de niñas de las cuales desconozco su nombre pero cuyas vidas hicieron algo que me llegó al corazón y me movió a hacer esto. Además, creo que influyó bastante el trabajo detrás que he desarrollado con otros niños en distintas formas (maestro, guía, consejero, asesor…) que me permitió hacer un poco más palpable las necesidades de esa generación y, la verdad, también mucho de mi historia de vida.


Niño alcanzado en Misión Sonrisas 2015

Hace unos minutos, mientras miraba algunas de las fotos que capturamos en la Misión de este año, vi una de un niño que sonríe mientras le acercan un paquete con dulces. Su mirada y sonrisa para con el agente es tan cautivadora y me hizo pensar algo que plasmé en mi cuenta de Instagram: “Estoy CONVENCIDO que la sonrisa de un niño tiene el poder de transformar las vidas, las situaciones, el mundo, ¡la historia! (Nosotros) Tenemos la responsabilidad de hacer que esas caritas sonrientes nunca se apaguen, para que aún en medio de la adversidad sigamos teniendo esperanza”.


Independientemente de lo religioso o lo involucrado que pueda estar en esos temas, Misión Sonrisas MX de ninguna manera es una organización religiosa (¡Dios nos libre!) pero es a través de ella donde miro, descubro y entiendo cómo es que se está levantando un ejército de personas con un corazón dispuesto a sembrar y cosechar el cambio que el mundo necesita… y el trabajo es tanto y al menos nosotros aún estamos en pañales, pero estamos creciendo… ¡y no vamos a parar!


Tengo, pero en realidad tenemos, muchos sueños e ideas para Misión Sonrisas MX, deseamos extender nuestras manos a todos los puntos que nos sea permitido. Hay tantos proyectos y planes que ni sabemos por dónde empezar pero que al paso del tiempo irán tomando forma. Creo que estamos hechos para servir, y si no servimos, no servimos.


Estoy seguro que esos niños a quienes hemos servido los últimos años, cuando estén de este lado, cuando sean mayores, cuando entiendan un poco más del mundo que les rodea, también serán llamados a hacer algo que marque a su país; pero por ahora, nosotros, no sólo quienes conformamos Misión Sonrisas MX, tenemos en nuestras manos una ÚNICA oportunidad de cambiar sus vidas, de sembrar en ellos la esperanza de un mañana mejor y de que aunque la cosa esté difícil, si nos ayudamos los unos a los otros, podemos extender las alas y remontar el vuelo. No es que nos hayan cortado las alas, es que ya nos olvidamos de cómo usarlas.


Finalmente, me quedo con algo que en la misión de este año me marcó y que, para mi, sólo para Abner, significó el respaldo de Dios para este proyecto y la confirmación de un llamado que ya conocía. Nos topamos con una familia de norteñitos cantando alabanzas, casualmente, y la rola que estaban tocando era una que me caía muy gorda cuando era niño “tú tienes un amigo que te ama, que te ama, que te ama, su nombre es Jesús...” (de verdad, la tarareo y me sigue causando un algo) y entendí que Él, el Dios invisible, mi “amigo imaginario” estaba ahí y estaba respaldando todo… ¡todo!


Otra chaparra alcanzada... muuuuy seria

En fin, una vez más salimos y tomamos las calles; no para marchar, no para gritar contra el gobierno (que bien merecido se lo tiene), no para insultar gente, dañar las calles o hacer destrozos. Esta vez fue nuestro turno de tomar las calles y llevar luz y esperanza, que fue intensificada con cada sonrisa y cada rostro de felicidad. Creo que entre los muchos que hacemos cosas similares, el trabajo de ayer en Misión hizo brillar un poco más nuestra ciudad.



Hoy, con gran satisfacción, puedo decir que #MisiónSonrisasMX2015 fue una ¡MISIÓN CUMPLIDA!


 
 
 

Comments


Featured Posts
Recent Posts
Search By Tags
Follow Us
  • Facebook Classic
  • Twitter Classic
  • Google Classic

PAbner Vélez Ortiz Periodista / Twitter: @AbVelez_ / © Coach Communication.  Gracias a Wix.com

bottom of page