Roto
- Abner Vélez Ortiz
- Sep 13, 2016
- 4 min read
Cuando era muy niño y vivía en casa de mi abuela recuerdo que un día mientras jugaba dentro rompí algo que no recuerdo qué era pero sí que era importante, las nalgadas con la “chancla negra” me hacen recordar el enojo que mi mamá I tenía por haber quebrado la vaina esa… supongo que así es como me siento ahora, enojado y roto.
Antes de escribir esto, en la ducha, lloré y me cuestioné sobre cuánto dolor podemos soportar para sobrevivir sin desmayar, sin desear la muerte, la propia muerte… sin llorar lo suficiente como para creer que puedes secarte, aún cuando ya estás seco por dentro. ¿Se acerca esta sensación a pasar todo un día pegado a la taza del baño tratando de mantener tus intestinos dentro mientras otra arcada te hace sentir que el fin está cerca?
Apolo, mi perro, se rehusó a comer esta noche y se limitó a verme y a tratar de rascar mi rostro con su enorme pata. Quizá quería arreglarme, y es que como la vaina esa que le quebré a mi abuela, así me siento hoy… ¿o será que ya estaba roto y no me había dado cuenta? Y si estaba así, ¿cuándo me rompí? Porque debí haberlo roto yo, porque si creo que “sobre toda cosa guardada, guardes tu corazón”, mi lógica me hace creer que, en verdad, toda la culpa es mía.
¿Cómo recojo mi desmadre?
¿Cómo me digo a mi mismo que esto también pasará?
¿Culpables? Los espectadores pueden tener nombres y apellidos en una lista interminable, pero en la mía solo hay uno, el mío.
Esta noche mi único pensamiento es el terror que me causa enfrentarme al mañana. A uno que ahora es incierto, que no existía en mi imaginario y que no se parece en nada a lo que hasta hoy había imaginado. Al menos sé que del otro lado hay gente que piensa y habla pestes de mi para empedoredar a otros, o quizá por envidia… de este lado el silencio y yo volvemos a reencontrarnos, aunque en realidad no estoy tan seguro de querer volver a ser su amigo.
Me aterra enfrentarme a mi mismo... aunque ahora entiendo que realmente estaba solo en esta aventura. Cualquiera puede decir palabras bonitas sólo para hacer "check in".
Me aterra creer en las mentiras y creer que, pese a todos mis esfuerzos, finalmente sí estaba construyendo castillos sobre la arena, aún cuando vi que la tormenta venía con todo contra mi, mi estupidez no me permitió huir a tiempo, salvarme y tratar de salvar lo que sea que tuviera que haberse rescatado de la tormenta.
Me aterra mirarme en el espejo, mirar atrás y ver que, en efecto, fracasé; me lo dije hace años y parece que, en realidad, me lo profeticé. Ahora soy un meme, la burla, soy el idiota que esperó la mañana despierto. Bien pude haberle hecho compañía a la loca del muelle de San Blas… bien puedo hacerlo ahora.
Y luego, ¿qué sigue?
¿Recojo los pedazos o los tiro? ¿Se vuelve a un estado primigenio? Porque de ser así qué pinche jodido me voy a encontrar, porque en ese estado lo único seguro que tenía era compañía temporal… sumamente temporal.
Dicen, cosa que no quiero oír, que se sobrevive. Pero nadie me ha dicho cómo chingados se sobrevive realmente… quiero creer que no estoy roto.
Quiero creer que no estoy roto.
Quiero creer, quizá de forma inocente o de la más pendeja posible, que hice lo mejor que pude, que di lo mejor de mi, que como dice mi tatuador "me la partí". Quiero creer que no estoy roto.
Quiero creer que no estoy roto.
No podemos limitarnos a reducir cada lesión a un golpe. Lo que nos afecta es acumulativo (aunque) pasa con el tiempo. Absorbemos golpe tras golpe, impacto tras impacto, dolor tras dolor… pero aún entonces, aunque sepamos cómo es que llegamos aquí, no significa que no podamos arreglarlo.
No se puede sanar cada herida y está bien (supongo, siempre se "sana" con el tiempo). Tengo que creer que aunque algo parezca no arreglarse, no significa que esté roto… quiero creer que no estoy roto.
Quiero creer que no estoy roto.
Creer que no estoy roto.
Que no estoy roto.
No estoy roto.
Estoy roto.
Roto.
Pitufresas:
Pese a todo, quiero creer… creer ahora en mi, en Abner.
Curioso que Katy Perry acompañe mi noche para con este dolor y que algunos años atrás me cantara "eres un fuego artificial" y, así, en esta noche fría, parezca que al oído me diga:
Oh, ye of so little faith Don’t doubt it, don’t doubt it Victory is in your veins You know it, you know it And you will not negotiate Just fight it, just fight it And be transformed ‘Cause when, when the fire’s at my feet again And the vultures all start circling They’re whispering, "You’re out of time” But still I rise This is no mistake, no accident When you think the final nail is in Think again Don’t be surprised I will still rise
... me levantaré.
Hoy me haces tanta falta, Felipe.
Commentaires